Hacia un modelo integral de la Economía Digital
Citation:
Work data:
ISBN: 978-84-613-7299-7Type of work: Communication
Categories:
Digital Divide | Digital Inclusion | Digital Literacy | ICT4DAbstract:
La intensificación tanto del uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación así como del número de políticas para promover su uso han comportado una creciente necesidad de medir el desarrollo de la Sociedad de la Información y además del impacto de dichas políticas. Sin embargo, el concepto de acceso " o de la falta del mismo, comúnmente referido como brecha digital " es un concepto que carece de consenso y que, en consecuencia, ha minado también el consenso hacia la medida de la brecha digital.
Presentamos aquí el análisis de 55 modelos con los cuales se ha querido describir " desde 1975 hasta 2009 " cuáles debían ser los componentes de la Sociedad de la Información y sus correspondientes instrumentos (índices, grupos de indicadores) para medir su evolución, definiendo así, de forma explícita como implícita, los distintos conceptos de acceso y los cambios en el mismo a lo largo de los últimos 35 años.
Estos modelos " la mayoría de los que han sido construidos durante este período " son tomados en cuatro grupos distintos: modelos descriptivos, nunca llevados a la práctica; modelos teóricos, contrastados con la realidad una única vez a modo de evaluación del modelo; índices, con medidas repetidas a lo largo de los años y cuyos resultados se agregan y ponderan en la forma de un índice; colecciones de indicadores, que, sin tener la forma de un índice, presentan una forma aplicada e implícita de definir la Sociedad de la Información.
Mediante un proceso de análisis cualitativo iterativo, clasificamos los indicadores que componen dichos modelos en una matriz de doble entrada. Por una parte, cinco categorías conceptuales referentes a sendas clasificaciones de los principales componentes de la Sociedad de la Información. A saber: Infraestructuras, Sector TIC, Capacitación Digital, Marco Legal y Regulatorio, Contenidos y Servicios. Por otra parte, una subdivisión de cada una de las categorías anteriores según una división común en la teoría económica: indicadores de oferta e indicadores de demanda. A estas 10 subcategorías se le añade una undécima: indicadores analógicos o pertenecientes a la economía real " en contraposición a la economía digital. En total se categorizan 1578 indicadores.
Podemos resumir los resultados de nuestra investigación en tres grandes grupos de conclusiones y una propuesta de solución para los problemas hallados.
Primero: la gran polarización existente entre modelos escorados hacia el Modelo de las Telecomunicaciones " que Marc Raboy (1995, 1998) definió para los medios de comunicación " y modelos sesgados hacia el Modelo de la Difusión, que nosotros adaptamos como el Modelo del e-Readiness. Estos modelos se presentan, respectivamente, como insuficientes a la hora de evaluar el impacto de las políticas públicas en la promoción de la Sociedad de la Información y para evaluar el impacto de las TIC en el desarrollo.
Segundo: contraintuitivamente, la deficiencia de indicadores para determinadas categorías así como relacionados con una aproximación de la demanda. Esta deficiencia se agrava al tomar el factor geográfico, con el 80% de países del mundo con graves carencias en materia de métrica de Sociedad de la Información, así como el factor tiempo, siendo extremadamente difícil el establecimiento de series temporales con unos mínimos de calidad. Según nuestra investigación, los motivos para estas deficiencias son dos: indicadores diseñados para objetivos muy concretos e, inversamente, diseños conceptuales adaptados a la disponibilidad de datos.
Las dos conclusiones anteriores nos traen a una tercera: el círculo vicioso en el que están inmersas las herramientas y las políticas para medir y actuar para la Sociedad de la Información, basadas en estrategias push cuando la evidencia empuja hacia estrategias pull basadas en la demanda y los usos efectivos de las TIC; estrategias que han renunciado a evaluar cualitativamente el impacto para ceñirse a una monitorización meramente cuantitativa, lo que comporta el descrédito de este tipo de políticas.
A la luz de estas conclusiones, sugerimos un modelo conceptual " al que llamamos Marco Digital de 360º " que incluya las 10 subcategorías mencionadas anteriormente, de forma que cubra tanto las necesidades de medida como las de evaluación de impacto de las políticas públicas para el desarrollo de la Sociedad de la Información.