Por segundo año, he participado en el ejercicio que sobre el futuro de los medios sociales propone Marc Cortés.
En las predicciones para social media en 2010 defendía que la necesidad de construir y concentrar el portafolio — especialmente en el ámbito digital — derivarían en una vuelta a la web personal o institucional, mientras que los social media serían una herramienta para estar presentes en las conversaciones que ocurran fuera de nuestra web personal, aunque siempre apuntando hacia esta para construir un portafolio extendido.
Siempre es difícil distinguir, en este tipo de predicciones, qué es una posibilidad probable fruto de una tendencia pasada de lo que uno querría o desearía que sucediese (con o sin tendencia, con o sin probabilidad). No obstante, mirando hacia atrás, si bien el portafolio o la web personal distan todavía de ser una estrategia común y extendida, la tendencia a reforzar la identidad digital (personal o institucional) sí creo que se ha cumplido e, incluso, gana más y más inercia a medida que pasan los meses.
Es en esta línea que elaboré mis predicciones (o deseos) para este año 2011 que acaba de empezar:
Los social media permitirán la actividad distribuida desde la identidad centralizada.
Abogábamos el año pasado por una “construcción del portafolio, por una vuelta a la web personal o institucional, utilizando los social media como un juego de espejos que nos refleje allí donde debamos estar también presentes”.
La realidad no ha ido tan rápido, pero los puentes sí se han tendido.
Por una parte, iniciativas como Facebook Connect, Sign in with Twitter u otras basadas en Open ID u OAuth se han hecho tan populares que es ya posible participar en cualquier parte “sin salir de Facebook” o “sin salir de Twitter”, etc. aunque el contenido se encuentre, efectivamente, en cualquier otro lugar.
Por otra parte, iniciativas como Flavors.me o Tumblr han permitido todo lo contrario: que aquello que está “en cualquier otro lugar” pero forma parte de nosotros pueda cobijarse bajo una misma identidad digital.
En definitiva: la participación se vuelve ubicua y descentralizada mientras que la identidad digital converge y se centraliza. Cabría esperar que esa tendencia se refuerce el próximo año 2011.
Un efecto secundario de estos movimientos aparentemente opuestos es que poco a poco se cierra el círculo de la Web Semántica: la interconexión de contenidos se hace más densa a la vez que el factor humano les da una nueva capa de significado. Un simple enlace de Twitter cobra un nuevo sentido cuando varios usuarios lo retwittean o responden a él, igual que un contenido en Tumblr adquiere nuevos matices al ser reblogueado o comentado por otros.
Otro efecto secundario es la acentuación de la tendencia de pérdida de privacidad y de seguridad en las redes sociales. A mayor interconexión entre contenidos y personas, más fácil es dejar rastro y más difícil volver tras los pasos y deshacer lo andado. Y a mayor interconexión automática o tecnológica — en oposición a la manual o humana — mayor facilidad de engaños vía phishing, pharming, spoofing o similares.
Más que nunca, es más necesario que nunca formar en competencias digitales avanzadas como la alfabetización informacional, la alfabetización mediática o la gestión de la propia identidad
digital.
Más información
- Predicciones para Social Media en 2011 (documento colaborativo),
entrada en el blog de Marc Cortés. - Predicciones para los Social Media en 2011, documento entero en Slideshare para consulta o descarga (PDF).